La depresión es una enfermedad compleja sobre la que pueden influir diversos factores, además de ser uno de los principales problemas de salud en nuestra sociedad. Tratarla es muy importante, por ello, como psiquiatra quiero hablaros de los principales tipos de depresión ¡Sigue leyendo!
Índice de contenidos
Principales tipos de depresión
La depresión es un trastorno mental que suele producir una tristeza profunda e irritabilidad durante largos periodos. Es una enfermedad que con frecuencia suele ser crónica y precisa de un tratamiento a largo plazo. La depresión es diferente a las variaciones habituales en los estados de ánimo y respuestas emocionales a los problemas de la vida cotidiana. Si no se detecta a tiempo puede convertirse en un problema de salud serio que causa sufrimiento, altera la vida de quien lo padece y puede, incluso, llevarlo hasta el suicidio.
Los trastornos depresivos constituyen un grupo enormemente heterogéneo de cuadros clínicos, desde leves o próximos a las reacciones emocionales no patológicas, hasta cuadros severos con gran afectación y riesgo vital. Contactar con un psiquiatra que pueda diagnosticar y tratar la depresión es fundamental. También es necesario desarrollar protocolos de actuación, abordajes específicos, en función de los datos y características de cada paciente en particular.
Dependiendo del número e intensidad de los síntomas presentados, los episodios depresivos pueden clasificarse como: leves, moderados o graves. Los episodios depresivos leves pueden producir alguna dificultad para seguir con sus actividades familiares, laborales y sociales, pero sin grandes impedimentos. En los casos más graves, el paciente es incapaz de mantener sus actividades, debido a grandes limitaciones. Los distintos tipos de depresión son:
Trastorno depresivo grave
También llamado trastorno depresivo mayor, se caracteriza por una combinación de síntomas que interfieren con la capacidad de trabajar, dormir, estudiar, comer y disfrutar de actividades y relaciones sociales. Es el más característico de los tipos de depresión, incapacita a la persona y le impide desenvolverse con normalidad.
El principal indicador de la depresión son cambios en el estado de ánimo, la persona se siente triste, apática, melancólica o irritable la mayor parte del tiempo, llegando a enojarse incluso por cosas muy pequeñas, además de pérdida de interés por las cosas que normalmente disfruta.
Trastorno afectivo estacional
El trastorno afectivo estacional (TAE) es un tipo de depresión que aparece y desaparece con los cambios de estación. Comparte los mismos síntomas que el trastorno depresivo mayor o grave, sin embargo, solo se produce durante determinados meses del año. La mayoría de personas que lo experimentan suelen sufrirlo más en otoño e invierno, puede que por la disminución de la luz solar, que afecta en las sustancias químicas del cerebro que afectan en el estado de ánimo y energía. Pero, también hay quienes suelen experimentar estos episodios depresivos en verano.
Trastorno depresivo persistente (Distimia)
La distimia es una forma de depresión en la que se experimentan los mismos síntomas que en el trastorno depresivo mayor de forma más leve. Es un tipo de depresión crónica cuyos síntomas se manifiestan de forma permanente durante un periodo de tiempo prolongado, y pueden ser más o menos graves en diferentes momentos. Debido a la duración de estos síntomas, puede parecer que el estado de ánimo decaído, la baja autoestima o la irritabilidad forman parte de la personalidad de esa persona y no se perciben como síntomas claros. Los cambios de humor, la inestabilidad emocional y la ansiedad son característicos en estos cuadros depresivos.
Depresión subclínica
Estamos ante el tipo de depresión que puede pasar completamente inadvertido, ya que no se aprecia o detecta la presencia de ánimo deprimido, además de que se es capaz de disfrutar de las cosas. Sin embargo, si se aprecian claramente otros síntomas como: pesimismo, ansiedad, irritabilidad, apatía, embotamiento afectivo, pérdida de apetito, disminución de peso o alteraciones del sueño, entre otras.
Depresión post-parto
La depresión post-parto se suele diagnosticar cuando una mujer que ha dado a luz recientemente sufre un episodio depresivo grave durante el primer mes tras el parto. No se conocen las causas concretas que lo producen , sin embargo, los cambios hormonales y físicos después del parto, junto al estrés de cuidar a un bebé, juegan un gran papel en ello. Se calcula que entre el 10% y 15% de las mujeres padecen depresión post-parto después de dar a luz. Es importante detectar estos síntomas, tratar y apoyar a la mamá para que no llegue a casos demasiado graves donde pueda peligrar su vida o la del bebé.
Depresión con síntomas psicóticos
Cuando una persona sufre depresión con síntomas psicóticos, junto a los síntomas del episodio depresivo grave, están presentes la ruptura con la realidad, ideas delirantes o alucinaciones. Los delirios suelen estar en consonancia con el estado de ánimo, suelen manifestarse como culpa, ruina o catástrofe inminente. Este tipo de depresión es especialmente complicada debido al contenido de las ideas delirantes, por lo que se debe contactar con un psiquiatra cuanto antes.
Trastorno afectivo bipolar
Los trastornos Bipolares, son un grupo de trastornos afectivos que se caracterizan por la presencia de episodios reiterados que alternan estados de ánimo deprimido, con episodios de exaltación, euforia, hiperactividad, etc. Además de intervalos de estado de ánimo normal. Los episodios maníacos cursan con estados de ánimo elevados o irritables, hiperactividad, aceleración del pensamiento, gastos descontrolados, autoestima excesiva y disminución del sueño.
Si sufres algún síntoma o cuadro depresivo o conoces a alguien en tu entorno que los sufre, contacta conmigo a través de mi página web o redes sociales (Facebook, Instagram y Linkedin), concertamos una cita y realizaré un diagnóstico del caso.